Cómo reparar tu Índice Metabólico y quemar grasa naturalmente
Disponible únicamente hasta el viernes 20 de septiembre de 2019
Parte 2 de 3
Cómo reparar los daños de las dietas y recuperar un buen Índice Metabólico
En la primera parte del Curso hablamos del efecto yoyo, que es el principal problema causado por las dietas.
Vimos que le ocurre a más del 80% de personas que hacen dieta y que la verdadera razón por la que se produce no tiene que ver con la fuerza de voluntad, el comer "de más", ni tampoco la falta de ejercicio.
El efecto yoyo, o el aumento brusco y desproporcionado del peso luego de hacer una dieta, es un fenómeno poco estudiado, pero ya se está empezando a conocer que genera un ambiente hormonal que dificulta la pérdida de peso en futuros intentos de adelgazar.
Esto significa que tus hormonas te van a obligar a comer en exceso sin que tú puedas evitarlo, y tu metabolismo quedará más lento que nunca haciendo que engordes cada vez más - incluso comiendo la misma cantidad de comida... ¡o hasta menos!
Hacer dietas te hace aumentar de peso porque tu cerebro interpreta la dieta como periodos de hambruna, y hace que tu cuerpo almacene más grasa de lo normal para prepararse para futuros momentos de escasez.
Esto lo concluyeron investigadores de las Universidades de Exeter y Bristol (Reino Unido) en un estudio que publicaron en la revista Evolution, Medicine and Public Health en Diciembre de 2016.
Y es lo que yo llamo "Modo Almacenagrasas".
Cuando estás en Modo Almacenagrasas simplemente no hay forma de perder peso
Podrías matarte de hambre, pero abandonarás rápidamente y empezarás a comer de forma descontrolada.
Y con las hormonas programadas para almacenar la mayor cantidad de grasa posible, engordarás inevitablemente mucho más de lo que te parecería normal.
Hasta 20% más peso que el que habías perdido inicialmente. Si originalmente habías perdido 5 kilos, recuperarás 6. Si habías perdido 10, recuperarás 12.
Pero déjame decirte que, en realidad, lo peor de todo ni siquiera es eso...
Lo PEOR es que la mayor parte de ese peso que se recupera es grasa, en lugar de masa muscular.
Lo que te dejan al final las dietas son más kilos de grasa.
Y eso es muy grave.
Porque la cantidad de grasa que tienes no solo es la que determina cómo te ves en el espejo, o cómo te queda la ropa...
... sino que también es la que determina tu nivel de salud.
Es por eso que las continuas bajadas y subidas de peso te impedirán adelgazar de forma estable, saludable y segura.
Es necesario acabar con ese ciclo YA, y adoptar una alimentación que te permita
- Adelgazar sanamente (perder grasa, no músculo y agua)
- Mejorar tu salud y tus niveles de energía
La única solución verdaderamente efectiva que te sacará del Modo Almacenagrasas y te hará adelgazar sin efecto yoyo está en la comida
De verdad, no importa cuántas dietas hayas hecho en tu vida.
Tu cuerpo tiene una capacidad tremenda de recuperación.
Y si comienzas a reparar el daño, con unos pequeños cambios en tu alimentación y en tu estilo de vida, tu cuerpo responderá nuevamente y volverá a equilibrarse.
Solo adoptando un estilo de vida y una alimentación saludables podrás mejorar tu salud y tu físico para siempre.
Eso sí, necesitas comenzar a hacerlo YA mismo.
Voy a mostrarte cómo puedes hacerlo, contándote un caso real: la historia de Mayte.
Ella es una seguidora de mi blog que, aplicando mis consejos (que verás a continuación), logró mejorar su forma de comer y perder los kilos que había venido acumulando hace años.
Estaba tan feliz y agradecida por su cambio que un día me escribió para contarme sus resultados, y permitirme conocer su historia, que hoy compartiré contigo.
Vas a descubrir cómo haciendo unos pequeños cambios puedes darle un gran empujón a tu metabolismo, para que no tengas que seguir aguantando hambre y muriéndote de ansiedad para evitar engordar.
Esto puede significar una transformación enorme en tu vida.
Para Mayte significó un antes y un después.
A continuación verás cómo lo logró.
Esta es la historia real de como Mayte perdió 10 kilos en tan solo 12 semanas cuando decidió dejar de hacer dietas
Mayte era ese tipo de mujer que podía comer todo lo que quisiera sin preocuparse por su peso, simplemente con una semana comiendo menos o un poco de ejercicio ya volvía a perder lo ganado.
Pero con el paso de tiempo y los años se dio cuenta de que su cuerpo cambiaba, ya no reaccionaba tan bien como antes. El comer de todo sin control estaba empezando a costarle caro.
Al pasar los 30 años llegó a ganar hasta 10 kilos.
Mayte sabía que era la hora de cambiar, necesitaba hacer algo al respecto.
Pero no estaba dispuesta a hacer otra dieta. Detestaba la idea de pasar hambre o no poder disfrutar de la comida...
Se rehusaba a comer solo verduras hervidas, pescado blanco a la plancha, pavo a la plancha... comida triste y sin sabor, para no conseguir ningún cambio notable en su peso.
Por eso prefirió comenzar a ir al gimnasio, pero los resultados fueron malísimos: se machacó durante semanas y no consiguió bajar ni un gramo, y hasta sentía que estaba engordando más.
Ya su vida estaba empezando a desmoronarse, se sentía terriblemente desanimada y desesperanzada.
- Escoger la ropa en las mañanas era todo un suplicio. No sabía que ponerse, nada le quedaba bien.
- Evitaba ver a sus amigos y familiares para que no notaran que había subido tanto de peso.
- Y lo peor es que este problema estaba afectando su vida de pareja.
¿Te imaginas lo que es tener miedo de que tu pareja te vea sin ropa? ¿Tener la sensación que por culpa de esos kilos ya no le vas a gustar y que no te va a mirar igual que antes? ¿Sentir vergüenza con la persona con la que se supone que tienes más confianza en este mundo?
En este punto de desánimo, de desesperación por no saber qué hacer para perder esos kilos que te sobran y volver a sentirte bien, es cuando las estúpidas "dietas milagro" parecen la única solución posible.
Y fue justo lo que le pasó a Mayte.
Un día sonó el teléfono. Era una de sus mejores amigas.
"Mayte, ¡encontré una dieta buenísima! ¿La hacemos juntas? Así nos apoyamos mutuamente...
Te presto el libro y empezamos la semana que viene ¿vale?"
Vale. Mayte necesitaba adelgazar.
El salvador libro llegó a sus manos. Era la famosísima dieta Dukan.
Mayte se leyó el libro de principio a fin, pero no le convenció para nada. ¿Realmente era necesario dejar de comer frutas y verduras?
Como no le daba buena espina, se puso buscar un poco por Internet acerca de la dieta antes de entrar de lleno con ella.
Y así fue como me encontró 🙂
En lugar de hacer la Dukan, Mayte empezó a probar y aplicar las cosas que yo explicaba en mi blog.
Solo unos pequeños cambios ¡y los resultados empezaron a llegar!
Lo primero que hizo fue cambiar el azúcar por stevia y dejar de comer pan y pasta hechos con harina refinada.
Compró una máquina para hacerse su propio pan con harina 100% integral.
Buscó herbolarios, mercados locales y tiendas donde poder comprar alimentos poco procesados, más naturales y sin tantos ingredientes.
Nada más con eso (sí, nada más con eso) Mayte empezó a perder peso rapidísimo... ¡3 kilos en tres semanas!
Fue tan impresionante el resultado que estaba asustada por la velocidad a la que adelgazaba. Al fin y al cabo solo había realizado unos pequeños cambios en su dieta. ¡Y sin prohibirse nada!
Pero en poco tiempo se dio cuenta que estaba comiendo bien, sano de verdad. Se sentía llena de energía y más activa.
Así que continuó con otro paso importante: cambió su tradicional desayuno de café y tostada por un desayuno completo con proteínas, que incluye huevos, pavo o pollo, salmón ahumado, yogurt...
Un desayuno rico en proteínas te ayuda a acelerar tu metabolismo y evita que sufras antojos de carbohidratos por la tarde.
Mayte pasó entonces a cuidar que todas sus comidas tuvieran los nutrientes necesarios: fuentes de proteínas, grasas saludables, muchas verduras que le aportaban la cantidad correcta de carbohidratos y fibra.
Y así en 5 semanas había perdido casi 5 kilos, la mitad de lo que deseaba perder. ¡En solo 5 semanas!
Sin poner en riesgo su salud. ¡Todo lo contrario! Se sentía llena de vitalidad.
Su madre, que estaba haciendo la dieta Dukan, al ver el gran cambio decidió probar la misma "dieta" que seguía Mayte.
Tenía sus dudas al principio, porque había probado mil y una dietas antes sin conseguir resultados. La Dukan le había funcionado y, aunque se estaba cansando de las restricciones y no le gustaba el ritmo que le imponía, le daba miedo dejarla y recuperar todo el peso (como le estaba pasando a medio mundo).
Pero, gracias al seguimiento y a los consejos diarios de Mayte, su madre pudo dejar la dieta Dukan sin recuperar lo que había perdido. Es más, incluso comenzó a adelgazar aun más fácilmente.
La llamaba entusiasmada por teléfono para contarle los avances 🙂
La madre de Mayte logró perder los kilos que quería y aparentar 10 años menos de lo que realmente tiene.
Ya fuera del "Modo Almacenagrasas", seguir mejorando fue fácil
Con el tiempo, Mayte siguió mejorando su propia dieta, porque ya sabía cómo tenía que alimentar su cuerpo.
Compraba alimentos preferentemente orgánicos o ecológicos, intentando evitar todos aquellos alimentos que requieren de procesos químicos. Así se mantenía en lo posible libre de toxinas, lo cual ayuda muchísimo porque un cuerpo lleno de toxinas no está sano y no podrá adelgazar.
A las pocas semanas ya había perdido otros 5 kilos, 10 en total. En menos de 3 meses.
Se sentía feliz de poder ir a la playa sin sentir vergüenza. Sus muslos y su barriga ya no eran un problema, así que ya no tenía que ponerse ropa ancha, sentarse de forma rara o cuidarse de las fotos para que no le vieran los michelines.
No tenía miedo de lo que pensaría su novio cuando la veía desnuda. Se sentía segura y sexy. Y por supuesto él también estaba más que contento con los cambios de Mayte 😉
Tanto así, que su novio también se apuntó y perdió 14 kilos. ¡Y sin renunciar a las cerveza ni a acompañar los almuerzos con un poco de pan!
Su hermano también comenzó a pedirle consejos sobre cómo bajar unos kilos, y ella orgullosa pudo ayudarle a él a mejorar su alimentación y, con ello, también la de su sobrinito.
A Mayte lo que más le gustaba de su nueva forma de alimentarse era que es muy fácil de seguir, y le hacía sentir llena de energía.
Dejó de ser simplemente una dieta de adelgazamiento para convertirse en la forma de comer que podía mantener el resto de su vida.
Alcanzó y se estabilizó en 55 kilos, y se permite salir los fines de semana y comer lo que le apetezca sin preocuparse de ganar peso.
Llegó a un punto en que le encanta su cuerpo, aparenta menos años de los que tiene, toda la ropa le queda perfecta y se siente plenamente feliz con su pareja.
Y, de hecho, un tiempo después de contarme su historia, me contactó de nuevo para contarme que se había quedado embarazada.
Mayte pasó un embarazo lo más saludable posible y su niña hoy tiene casi la misma edad que mi hija Marian (6 años). Se siente orgullosa de estarle transmitiendo a su hija esa forma de comer tan saludable que le permitió a ella estar feliz con su cuerpo.
Logró sentirse bien, con salud, y sin temor a engordar
Mayte mejoró su vida cambiando sus hábitos.
Aprendió qué debía comer para nutrir su cuerpo, y qué debía evitar para liberarlo de toxinas.
Descubrió que era realmente fácil convertir su cuerpo en una "máquina quemagrasa", como dicen por ahí...
Y ahora no va a tener que preocuparse nunca más por su peso.
Además se siente joven, viva, segura y atractiva.
Mayte y su familia son un ejemplo que he querido darte para que veas lo fácil que es adelgazar saludablemente cuando sabes realmente lo que tienes que hacer.
Analizando la experiencia de Mayte y su familia, la mía propia, y la de varias decenas de personas más que también lograron resultados similares luego de haber sufrido mucho con dietas y sentir que su metabolismo estaba lento y descontrolado, encontré un patrón.
Todos estos casos tenían tres cosas en común:
- Comían muchos alimentos procesados, incluyendo comidas "light", y pasaron a opciones más naturales.
- Se restringían muchos alimentos y trataban de comer poco, y pasaron a una alimentación más variada, completa y libre.
- Estaban en Modo Almacenagrasas, engordaban fácilmente y sufrían efecto yoyo, y pasaron a Modo Quemagrasas sintiéndose con más energía y vitalidad.
Y contrastando con mis investigaciones y estudios pude confirmar estos tres factores que, cuando se conjugan, permiten reparar los daños que las dietas han causado.
Es así que creé una forma sencilla de aplicar estos cambios siguiendo una secuencia específica, mediante mi Sistema DIA.
El Sistema DIA permite salir del Modo Almacenagrasas y restituir la pérdida de peso saludable de manera efectiva
El Sistema DIA es un conjunto de estrategias que permiten reparar los daños causados por las dietas y el efecto yoyo para lograr poner el cuerpo en el mejor estado posible para quemar grasas.
Se basa en tres aspectos:
- Desintoxicar el cuerpo (D)
- Incluir los nutrientes necesarios (I)
- Acelerar el metabolismo (A)
Y están todos implementados dentro de mi programa Adiós Efecto Yoyo, donde te acompaño paso a paso, día tras día durante 12 semanas, diciéndote exactamente qué cambios debes realizar para lograr resultados de inmediato. Son muy sencillos de aplicar, y los iremos implementando en el orden óptimo para maximizar tus resultados.
Voy a invitarte a que ingreses al programa y obtengas los resultados maravillosos que han obtenido los demás miembros
Por eso, en el Seminario Online de este sábado 14 de septiembre te voy a explicar detalladamente cómo funciona el programa (está organizado en 4 pasos), y qué es lo que obtienes al ingresar.
También te voy a mostrar algunos casos de éxito, para que veas qué es lo que se puede lograr realmente con el Programa Adiós Efecto Yoyo.
Y te diré cómo puedes hacer para ingresar tú también, si decides que eso es lo que quieres.
¿Nos vemos este sábado?
En el Seminario Online en vivo y directo de este sábado 14 de septiembre te daré el Plan 1-2-3 de hábitos saludables efectivos para que completes lo que estás aprendiendo en el Curso y consigas lograr este año el propósito de perder peso y ser saludable que te planteaste en enero.
Y luego del Seminario, en la tercera y última parte del Curso, te explicaré con detalle en qué consiste exactamente cada uno de los tres aspectos del Sistema DIA, y te daré ejemplos precisos que podrás aplicar de inmediato para restaurar tu Indice Metabólico.
Recibirás la Parte 3 del Curso en tu correo el próximo lunes 16 de septiembre.
Mientras tanto, completa las actividades que te he asignado más abajo, y nos vemos enseguida en los comentarios 🙂
Dietista-Nutricionista, Dra. en Fisicoquímica, Coach Nutricional Certificada Pn2, Entrenadora JNL Fusion
PUNTOS CLAVE DE HOY:
ACTIVIDADES DE LA PARTE 2:
¿Te gustó la historia de Mayte?
¿Te has identificado? ¿Qué idea has sacado de ella que puedas aplicar en tu caso? ¿Qué detalles te gustaría conocer sobre el Sistema DIA?
Déjame un comentario a continuación: